La milla roja

Al desoír a La Junta Electoral Central (JEC), Pérez Rubalcaba supuestamente facilitó el desenlace de 'la milla roja' de Barcelona

El vicepresidente del Gobierno y ministro del Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba, con su falta de intervención-y desoyendo a ‘La Junta Electoral Central (JEC)’, quien decidió que “Así pues, desde las 00.00 del sábado y hasta el domingo, las acampadas del movimiento 15-M’ de la Puerta del Sol en Madrid y otras ciudades quedan prohibidas”-, permitió que las mismas se celebrasen.

Al desoír a ‘La Junta Electoral Central (JEC)’, el señor Pérez Rubalcaba-ministro del Interior del Ejecutivo español-, supuestamente facilitó el desenlace de ‘la milla roja ‘de Barcelona. Las decisiones políticas mal tomadas, y en algunas ocasiones, traen consecuencias irremediables para el mantenimiento del orden público en las naciones donde se toman.

Esta aptitud propició que los indignados del 15-M de la plaza de Cataluña (Barcelona), traspasasen ‘La milla roja’, que separa la libertad de poder manifestarse con el libertinaje de poder ejercer la violencia, la coacción y el impedimento de tratar de ejercer la actividad parlamentaria en el ‘Parlamento Catalán”, a los parlamentarios catalanes elegidos democráticamente, en las pasadas elecciones del 22-M( elecciones municipales y autonómicas españolas ).Indignación e indignidad jamás deben caminar juntas en cualquier democracia legalmente constituida( la joven democracia española fue instituida por la Constitución Española de 1978.BOE núm. 311.1,de 29 de diciembre).

Desafortunada fue la actuación del conseller de Interior, Felip Puig, el próximo pasado día 27 de mayo, quien ordenó la operación policial que permitió la limpieza de la plaza de Cataluña, no interviniendo, sin embargo, el 15 de junio, cuando se llevaron a cabo presuntos delitos por los indignados, previstos en los artículos 494 y 498 del Código Penal, los cuales prevén la pena de hasta cinco años de cárcel para aquellos que empleen la fuerza, la violencia o la intimidación para impedir a un diputado asistir a sus reuniones. Felip Puig no sabe dirigir ni coordinar a los ‘mossos d’esquadra (policía autonómica catalana).

Estrategia política del nuestro buen amigo, Felip Puig, sin duda alguna, La pasividad del conseller de InteriorFelip Puig, más que arrinconamiento o negligencia puede decirse y lo digo…que fue una maniobra política sutil e irresponsable: no quiso ni supo defender a los parlamentarios para proteger su derecho y su deber de acudir al Parlamento a discutir la Ley de Presupuestos. De hecho, entiende uno que las alarmas y dispositivos policiales se debían haber tomado un día antes del contratiempo- supuestamente delictivo-, usado por ‘los indignados catalanes’.

Desde hacía días tanto Felip_Puig como el resto de lectores de periódicos y medios audiovisuales sabíamos que había una concentración programada para impedir el acceso al Parlamento el día del debate del presupuesto.Y continúo afirmando: la violencia nada tiene que ver con la indignación de aquellos que promulgaron con anterioridad propuestas coherentes y razonadas. Pasamos por una democracia próspera para los políticos de turno españoles: ellos no quieren ver que la prosperidad del pueblo-sus votantes- está de capa caída; ellos no quieren ver que los recortes sociales para el pueblo -libre y soberano- corren como un tren ‘de alta velocidad’; ellos no quieren la cota de desempleo alcanzada en España: 4,9 millones de parados según estadísticas al respeto y tampoco quieren ver las reducciones de salarios a las rebajas de los servicios en general.

Pero es curioso observar que ‘estos indignados’ no han mencionado ni por asombro que la verdadera crisis económica española se debe, principalmente, al mal gobierno del POSE. Presuntamente, y puede ser que me equivoque, los indignados del M-15 fueron impulsados por IU, que obtuvo los votos de los españoles que jamás espero conseguir. Si hubiera sido un movimiento puntual y real, se podían haber presentado a las elecciones como un partido más, con sus símbolos correspondientes y programa explicativo de lo que ofrecían al electorado español.

Yo estoy indignado por la falta de defensa de la dignidad humana, yo estoy indignado porque casi la mitad de muchachos/muchachas menores de 25 años están en paro, yo estoy indignado porque está generación está perdida y sin futuro, yo estoy indignado porque la mitad de los pensionistas cobran una pensión que está por debajo del umbral de la pobreza, yo estoy indignado porque los políticos se jubilan con maravillosas pensiones por ellos creadas, yo estoy indignado porque cuando salen los políticos de esos lujosos edificios donde se asientan las autonomías españolas (en número de diecisiete, que existen en nuestra “España pobre”),ellos y ellas van elegantemente vestidos como jamás pensaron: con trajes de alpaca los primeros, con modelos ‘loewe’ las segundas: todos, desde luego, últimos modelos, y pagados con los dineros de los contribuyentes españoles. ¡Bonito panorama el que describo! Son, sin duda, historias para no dormir.

Y uno sigue indignado: porque ningún político se ha planteado suprimir ayuntamientos y autonomías-innecesarios unos y otras- ,que son terriblemente gravosos para la economía española; porque ningún político quiere reconocer que las diputaciones provinciales son inútiles por su falta específica de funciones ,ya que existen las autonomías y porque ningún político suprime la ley injusta y desmesurada que les permite a ayuntamientos y autonomías( alcaldes y presidentes de unos y otras) elevarse sus propios emolumentos en las cuantías que crean conveniente…

Ésta no es la España democrática en la que todos creíamos y por la que todos votamos en su día. Y es que el primer gobierno de la democracia española salida de las urnas (15 de julio de 1977), fue presidido por Adolfo Suárez (UCD, verdadero artífice de la transición española).Pero en mi humilde opinión se pagó un precio muy alto: la creación de las ‘17 autonomías españolas’, cuyos presidentes actuales los considero como ‘Virreyes_de_Nueva_España’: la democracia tenía un precio. Sé que para aceptar nuestra incipiente democracia nacida en 1978, y todos lo sabemos, hubo que aceptar el establecimiento de 17 autonomías y dos ciudades autónomas (Ceuta y Melilla), las cuales han resultado ser, económicamente hablando, nefastas para España y sus ciudadanos. ¡Qué costosas nos están saliendo unas y otras! Y lo vuelvo a repetir: tenemos 17 virreyes en la Península Ibérica.

Y, al final, hemos de comprender que entre ‘los indignados del 15-M’ hay de todo como en botica. Hecho que también podemos comprobar entre los políticos: imputados, corruptos, y otros que cumplen con su deber honestamente. Han de entender los movilizados que por el camino de la violencia nunca se consigue nada (¡violencia engendra violencia!, que nadie se asombre por lo que deseo dar a entender), dado que la violencia ejercida contra los parlamentarios catalanes fue-mírese por donde se mire-, una conducta y forma de proceder antidemocrática y delictiva…

Todos esperamos que el espectáculo desagradable y fuera de todo contexto del ‘miércoles negro barcelonés’ (15 de junio del año actual) nunca jamás se vuelva a repetir: ‘La Ley’ debe defender a todos por un igual, ya sean estos indignados o parlamentarios, pero en cualquier ‘estado democrático’ nadie debe saltársela.

La Coruña, 23 de junio de 2011
Copyright© Mariano Cabrero es escritor

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